El último encuentro internacional de The App Date, referencia sobre apps en España y Latinoamérica que se celebra en el Espacio Fundación Telefónica, abordó la realidad virtual y la revolución de la tecnología móvil en el sector de los viajes de ocio y turismo. Pero, el futuro del turismo ¿es, también, virtual? ¿Influirá determinantemente en el turismo de siempre?
Decenas de profesionales analizaron y debatieron sobre cómo será la experiencia turística del siglo XXI y el perfil del nuevo viajero, que ha integrado su móvil o tableta en todas las fases del viaje, ya no solo en la de preparación de los itinerarios.
En la cita se presentaron las más novedosas aplicaciones, con ejemplos que servían a los usuarios para preparar su vuelta al mundo con 20 euros al día y otras apps muy novedosas como el dispositivo Nautilus VR, un casco de Realidad Virtual Submarina.
Los nuevos destinos turísticos inteligentes, las smart cities y la monitorización de los datos del turista para personalizar la experiencia del viajero y ayudar a mejorar la calidad de vida del residente centrarán las líneas de trabajo más importantes para la Sociedad Estatal para la Gestión de la Innovación y las Tecnologías Turísticas, Segittur.
Otro de los retos de las tecnologías relacionadas con el turismo serán los que se presenten con la nueva era virtual. ¿Cómo se adaptará el viajero a estos nuevos mecanismos? ¿Influirá realmente en el turismo tradicional?
Tanto en este sector como en el cultural – y más aún cuando se conjugan ambas-, el potencial de la realidad aumentada es evidente: permite interactuar con toda la información necesaria al pasear al lado de un monumento histórico o entrar en un museo y deja vía libre para nuevas experiencias como las relacionadas con los deportes de aventura. De ahí el desarrollo de las Google Glass, las versiones de realidad aumentada de Samsung y Gear VR, Magic Leap así como Holo Lens de Microsoft.
Sin embargo, para abordar el futuro virtual del turismo se deben abordar los retos que estas tecnologías atraviesan. Tal y como desglosa el portal Andro4All, todavía se continúa trabajando para conseguir la tecnología puntera para que todos los movimientos, gestos y demás acciones que el usuario realice sean correctamente reconocidas y procesadas por los diferentes dispositivos, existe una una barrera muy grande para el consumidor y la puesta a punto de este tipo de productos, aún debe sufrir un proceso de miniaturización, es decir, hacer todo esto proceso tan pequeño como nuestro bolsillo o como unas gafas graduadas al uso.